Introducción

En los cursos de formación pastoral, destacamos siete aspectos del ministerio de la Iglesia (la adoración, la oración, la enseñanza, los sacramentos, la evangelización, el servicio y el compañerismo). También se pueden resumir en tres áreas: la adoración, el cuidado espiritual, y la misión. Aunque el propósito de muchas de estas actividades es ministrar a otros, no se puede separar de nuestro propio crecimiento espiritual. Es decir, al ministrar a otros, también ministramos a nosotros mismos. Por ejemplo, al evangelizar, sentimos la presencia y la dirección del Señor de una manera especial. Así es con todos los aspectos del ministerio. Además, el proceso de aprender a ministrar a otros es parte de nuestro crecimiento espiritual, porque estamos aprendiendo a ser más como Jesús.   

Por lo tanto, en los ejercicios de formación espiritual de esta serie de cursos, practicaremos los diferentes aspectos del ministerio, pero también reflexionaremos sobre cómo el hecho de hacerlo nos ayuda a crecer espiritualmente. 

Ejercicio

Esta semana, se trata de la oración, y en otras semanas de este curso destacaremos la evangelización. La apologética es un instrumento para ayudar en la evangelización, y no está separado de ese aspecto del ministerio. La oración también es un aspecto importante de la evangelización.

Esta semana, el ejercicio de formación espiritual consiste en orar por algunas amistades o algunos familiares que no son creyentes. Jack Miller dijo una vez que si tuviera una sola hora para evangelizar a una persona, ¡pasaría 50 minutos orando y 10 minutos hablando con ella!

En Juan 4:35, Jesús dice que debemos "alzar nuestros ojos y ver los campos que ya están blancos para la siega."

Abra sus "ojos espirituales" y piense en algunas personas que podrían estar dispuestas a conversar acerca de cosas espirituales. Anote sus nombres y tenga un tiempo de oración por ellas. Ore que el Espíritu Santo prepare sus corazones, que de alguna manera presten atención a Cristo, que vean algo diferente en los cristianos que conocen, y que comiencen a inquietarse y buscar al Señor.

Medite en Juan 10:27 al orar por estas personas: "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen." No podemos convertir a nadie, pero podemos compartir el evangelio y confiar en que el Espíritu Santo traerá a Sus ovejas a Cristo.

El diario de reflexiones

Abra un documento nuevo (en formato Word o texto plano) que será su diario de reflexiones para el ejercicio #1 de formación espiritual.

Dedique un tiempo para escribir sus reflexiones sobre este tiempo de meditación y oración:

a. ¿Ha pensado en algunas personas en particular que podrían estar dispuestas a conversar acerca de cosas espirituales?

b. ¿Cómo ha sido la experiencia de meditar y orar por estas personas? Al meditar y orar por ellas, ¿le ha motivado a acercarse a ellas para conversar?

Entregue su documento (en formato de Word o texto plano), siguiendo las instrucciones abajo para el domingo por la noche de esta semana.